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Azorín, junto con Pío Baroja y Ramiro de Maeztu, forma el núcleo de la literatura del 98. Su obra es variada en términos de géneros: novelas, libros de recuerdos, cuentos, teatro, ensayos. Hoy en día es recordado como el escritor finisecular que frente a los cambios y desastres de España, termina preocupándose por la naturaleza, la gente y los objetos de su país (Castilla), por la angustia del tiempo, por el misterio de la existencia, por una evocación constante del tiempo pasado, en el estilo, por las frases cortas y a menudo abruptas y por el detallismo en el describir. Estos elementos filosóficos y artísticos los comparte con otras figuras del 98.
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Valle Inclán cultiva una literatura muy distinta a la de Azorín. Crea obras de características variadas y hasta opuestas; en su primera etapa hay una preocupación por la belleza de la prosa, la alusión exótica, el ambiente sensual, erótico y hasta degenerado. Valle Inclán también es el autor de una literatura realista, crítica y aún fea y grotesca. Es el creador del "esperpento". A pesar de las diferencias señaladas estos artistas tienen en común su ruptura con el pasado tanto en cuestión de arte como en sus ideas sobre el pasado presente y futuro de España a la luz del desastre.
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Ángel Ganivet García ( - ), y . Se le considera, por su incertidumbre vital y por su angustia espiritual, precursor simbólico de la , proyectando su lucha interior en su visión de España en su obra Idearium español, donde interpreta a como dolorosa rodeada de la cultura positivista y escéptica del siglo XIX.
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Unamuno (1864-1936) es uno de los ensayistas de mejor calidad. Es una de las figuras más destacadas de la literatura moderna. Es una figura compleja y contradictoria, como lo son por definición los espíritus del mundo moderno. En él y en su obra predominan la lucha, la negación, la duda. Es poeta novelista, ensayista, dramaturgo, cuentista, pensador, educador y profesor de literatura clásica en Salamanca.
Unamuno nació en Bilbao, en 1864. Fue catedrático de griego en la Universidad de Salamanca, donde desempeñó varios cargos de gobierno, entre ellos el de Rector. Fue desterrado a Fuerteventura por oponerse a la dictadura de Primo de Rivera, de donde pasó poco después a Francia. A la caída del dictador, regresa a España y se le restituyen todos sus cargos. Fue diputado republicano. Muere en Salamanca, en 1936.
Es uno de los escritores con un estilo más característico y personal. Entre los elementos esenciales sobresalen su lucha constante con el idioma para amoldarlo a su intención expresiva. Es duro, seco, directo, con abundante empleo de neologismos.
Su objetivo no es –oponiéndose así al modernismo- lo musical, lo superfluo, lo ornamental, sino el mensaje, la comunicación, la idea. Escribió sobre las pasiones del hombre, sobre todo en sus novelas, en las cuales hay un sentimiento de angustia que muchos han identificado con la angustia existencialista del individuo moderno. La angustia también se manifiesta en su poesía. En ella se expresa el dolor, el sufrimiento, el espejo del alma que duda, que vacila y que recuerda aunque a veces es posible ver el lado juguetón (lúdico) y experimental de su verso.
Abel Sánchez
La envidia es uno de los temas principales en esta obra. Protagonizada principalmente por Joaquín hacia Abel, se va haciendo cada vez más fuerte con el paso del tiempo. En un principio, Abel y Joaquín eran como hermanos. Se necesitaban mutuamente para conocerse, eran parecidos en el sentido de que cada uno de ellos tenía una parte del otro, pero esto puede ser lo que genera la envidia y el odio de Joaquín. Sin embargo, su odio surge mayormente cuando Abel se queda con la mujer que él ama, Helena. Joaquín nunca puede superarlo y hasta comienza a odiarse a si mismo. Luego de que Helena despechara a Joaquín, aparece Antonia en la vida del pobre Joaquín, la cual está profundamente enamorada de él. Por el contrario, Joaquín, tan lleno de odio y rencor, no se da cuanta la clase de mujer que tiene al lado. Finalmente, se terminan casando, él sin amor y ella con la promesa de que intentara darle todo su amor para que viva una vida feliz.
Sus profesiones también son punto de choque en la historia. Joaquín ha estudiado para ser medico y Abel para ser pintor, pero Joaquín siempre tiene que esforzarse mas para ver los logros, mientras que Abel solo pinta por que es talentoso, aunque no siente lo que hace. De todos modos, la fama solo crece en Abel y esto hace que Joaquín, en vez de perseguir la verdad y el saber, se interesara más por los premios y por ser mejor que Abel. La envidia de Joaquín llega tan lejos en la historia que obliga a su hija Joaquina a que seducir a Abelin, hijo de Abel y Helena, para que se casara con ella y poder así vengarse se su “mejor amigo”.
La envidia que siente Joaquín es tan enfermiza que no tiene cura. Se casa, se hace devoto de la Iglesia, pero no consigue nada. Siempre está Abel presente en su vida y siempre Joaquín encuentra un nuevo problema, algo nuevo para odiar de Abel, es por eso que nunca alcanza la felicidad y acaba matando a Abel, por más que éste nunca había intentado hacerle ningún mal a su amigo.
Conclusión
En conclusión, a pesar de la desestabilizada situación política y económica que España vivió durante las primeras décadas del siglo XX, la cultura, aunque a veces adolorida o perseguida, no sólo continuó sino que se fortaleció. Podemos decir que, todos los escritores que pertenecían a la “Generación del 98”, son una clara imagen de la escritura moderna. Con su renovación del género a través de sus obras, modernizando la prosa, haciéndola sencilla y natural pero también correcta, y recuperando expresiones locales y arcaísmos reflejan como era la situación política y social de España es esa época.
BibliografíaUNAMUNO, Miguel de. Abel Sánchez. Buenos Aires, Cántaro, 2006.
“Generación del 98”. En:
“Generación del 98”. En: www.geocities.com/jagl1949/libaes/lbe08.htm
“La Generación del 98”. En: www.spanport.ucsb.edu/faculty/jefferso/GEN98.S30.htm