Otro punto importante en el relato son los diferentes subtemas que continúan apareciendo a medida que el relato se va desarrollando, y son los siguientes. Primero, el autor trata el tema de la fama, describiendo como los exploradores y la sociedad en la Europa antigua perseguía la búsqueda de la fama, por medio de nuevos descubrimientos, y es así que nació África ante los ojos del mundo entero. “todos los exploradores querían escribir su nombre en la historia, entrar en la galería de la fama como hacían los hombres semidioses de la Grecia antigua. África era el mejor paisaje para su gloria personal.”
Otro tema tratado en el relato es sobre la naturaleza ya que en todo momento el autor realiza descripciones detalladas acerca de la naturaleza abundante encontrada en África, la fauna, flora, etc. “…rebaños de bueyes que cruzaban de un lado a otro, perezosos y despectivos hacia nuestro vehiculo… Luego, carretera adelante, en dirección al sudoeste, se abrió la niebla, lució el sol en el cielo estirado y las colinas crecían redondas y verdosas. Todo el paisaje era curvo y ondulado, sin ángulos ni artistas, sin líneas rectas ni quebradas, nada podía alterar la voluptuosidad de la tierra”
Más adelante en el relato, se destacan otros temas como por ejemplo la discriminación del hombre blanco y los negros; la aventura en general, por parte de mismo autor en su viaje por África y también por parte de los exploradores realizando sus descubrimientos; la amistad, especialmente existía en algún momento entre Burton y Speke; la nostalgia por lo desconocido y finalmente la leyenda y los mitos, ya que antes del descubrimiento del interior de África, se habían hecho una serie de rumores y leyendas esparcidas por todo el mundo que hablaban de bestias y tribus practicantes del canibalismo que habitaban en el interior de África, se creía que si algún osado conseguía entrar en aquellos territorios, no saldría con vida.
En tercer lugar, otro punto que se destaca en este libro es la aparición de imágenes visuales, por ejemplo “El aire era muy fresco, con aroma de pinos y eucaliptos. Los abetos gigantes pintaban un paisaje navideño en el febrero africano y el rumor del viento colgaba un sonido de campanillas en las hojas de los cedros azules” Aquí, en mi opinión, el autor quiere transmitirle al lector una atmósfera de tranquilidad y armonía relacionada con la belleza natural de África. Además, también se destacan continuamente el color rojo debido a la tierra rojiza, el verde por la naturaleza abundante, la imagen del sol creando un sentimiento de calor y finalmente el color azul, expuesto cuando el autor se refiere a los lagos o a algún territorio acuático, como por ejemplo el río Nilo.
Esta historia esta principalmente ubicada en el presente (siglo XX), ya que la edición del libro fue en 1996. No obstante, como ya expliqué anteriormente, se hacen referencias al pasado, a la época de los exploradores del continente africano, situados en los siglos XVIII y XIX.
Con respecto a las influencias literarias en las que el autor se basó para la escritura de este relato, antes del comienzo del libro, hay algunos ejemplos de sus influencias. “El corazón de las tinieblas”, la frase de Graham Greene y también un antiguo proverbio romano le sirvieron de influencia a Javier Reverte a la hora de escribir su relato.
El contexto del libro es África, ya que todo acontece allí, las experiencias propias del autor, y también las experiencias de los exploradores.
Finalmente, con respecto al lenguaje literario utilizado por el autor, se utilizan los lenguajes narrativo, ya que no es solo un relato de viaje sino que hay ciertos detalles que ha agregado el autor para que el libro sea mas atractivo “Algunas situaciones han sido retocadas con toda deliberación por el autor, de forma tal que, trastocando un poco la realidad, ganase la coherencia del texto.” Y también se utiliza un lenguaje evocativo, el cual invita al lector a estar ahí. Este ultimo recurso esta basado en la creatividad del autor al describir las diferentes situaciones y el misterio que el mismo genera. Un ejemplo de esto es cuando se describe el paisaje de las afueras de Kabale llamado “la suiza de África” y también cuando el autor describe el paisaje de los alrededores de las fuentes del Nilo.