Platón dice que, “La única forma de acceder a la realidad inteligible era mediante la razón y el entendimiento; el papel de los sentidos queda relegado y se considera engañoso.”
Se confía en la escritura no solo por los resultados que se obtuvieron de ella sino porque la escritura se razona y no es algo en lo que se crea a ciegas esperando que sea cierto, sino que la escritura cumple con su función primordial la cual es mantener la historia original intacta.
Otro punto es que sin escritura no se podría estudiar el pasado que es a lo que se dedica la historia, pues gracias a la escritura se tienen registros de los acontecimientos que posteriormente se analizaran y comprenderán. Aunque se pueden transferir conocimientos por medio de la comunicación oral, para fines prácticos del aprendizaje es mejor basarse en algo escrito en cierta época, que basarse en relatos que se han transmitido durante años, mismos que han ido cambiando durante el tiempo hasta el punto en el que su razón de ser original se pierde.
La función de la razón en la historia, “está sometida a la transfiguración; se convierte en su opuesto, lo mismo que la razón trasforma el mundo en lo opuesto de lo que una vez fue. De este modo, la racionalidad prevalecería internamente, mientras que la irracionalidad externa se convertiría en la esencia de la práctica histórica”.
El lenguaje ha sido y seguirá siendo una forma de transmitir los sentimientos, los razonamientos críticos y filosóficos a otras personas, permitiendo así conservar conocimientos pasados, y por medio de la escritura (derivación del lenguaje) se puede conservar por siglos.
El lenguaje y el razonamiento están muy ligados entre sí y desarrollan un papel esencial en la Historia. Se puede explicar la correlación de estas formas de conocimiento por medio de un círculo, pues a raíz del lenguaje el hombre puede comunicarse, llevando así a compartir sus razonamientos. Luego a raíz del razonamiento, el hombre inventa la escritura (una forma de lenguaje) para conservar los conocimientos adquiridos y transmitirlos. Posteriormente a raíz de estas escrituras, otra generación puede adquirir nuevos conocimientos basándose en lo que previamente se conocía o probar que un conocimiento antiguo era erróneo y así permitir un avance en la historia tanto como en el razonamiento humano. Y este ciclo se puede repetir infinitamente hasta el punto en el que el razonamiento se considere innecesario y ahí tanto la historia como la comunicación estarían en riesgo de un malentendido.
A diferencia de la Prehistoria, el motor de la Historia es la lucha de clases según lo propone Marx. Según la teoría de Marx, la sociedad humana es el resultado histórico de la lucha por la existencia. El carácter de la sociedad es determinado por el carácter de la economía. Ésta es determinada por el carácter de los medios de producción. A cada época en el desarrollo de las fuerzas productivas le corresponde un régimen social definido. Es decir, los regímenes sociales nacen, se desarrollan y se convierten en obstáculos al progreso anterior. Sin embargo, ninguna clase social dominante ha abdicado voluntariamente, porque los argumentos basados solamente en la razón jamás vencerán a los fundados en la fuerza. Es necesaria una revolución. Esto supone un cambio del régimen social, que se manifiesta políticamente en el traspaso del poder de una clase ya agotada a otra en ascenso, que debe agrupar en su entorno a la mayoría de la población. Esto es lo que genera el cambio de etapa.
El razonamiento, lleva al pueblo de la ignorancia a un estado en que se cuestiona la sociedad en general, creando así juicios propios en los cuales definen qué está mal en la sociedad, qué debe de mejorar y qué funciona, razonamiento que muchas veces lleva a un conflicto entre la sociedad misma. Si hacemos una analogía sobre estas dos expresiones, podemos deducir que si la lucha de clases es el motor de la Historia, y el razonamiento lleva a la lucha de clases; por ende el razonamiento es el motor de la Historia.
Por ejemplo, La Ilustración fue un proceso en el que el hombre empezó a utilizar el razonamiento crítico, habiendo dos clases: la nobleza y la obrera. Como consecuencia lo que obtuvimos fuero constantes luchas, como la Independencia de las 13 colonias, procesos de independencia a lo largo de América Latina, una Europa en constante guerra, y más tarde la Revolución Francesa.
La razón permitió al hombre utilizar el pensamiento crítico que llevó a la construcción de nuevas tecnologías, mismas que han ido cambiando a lo largo del tiempo con razonamiento posterior, permitiendo así un progreso constante. Por ejemplo: la aparición de la pólvora a raíz del uso de la razón de los chinos cambió la forma en que las guerras se pelearon de ahí en adelante. Sin embargo, esta tecnología se ha ido adelantado y progresando hasta llegar a las bombas nucleares, satélites y misiles balísticos intercontinentales que podemos observar hoy en día.
La teoría Neoclasicista en el Siglo de las Luces menciona cómo el hombre rechaza todo aquello que le sea impuesto y sólo admite lo que le llega a través de la luz de su razón. Esto demuestra cómo la razón ha afectado históricamente y socialmente a la humanidad de una manera en la cual primeramente genera una comunicación crítica, después genera conflictos sociales por choques de ideales y finalmente afecta de manera histórica al haber generado que se cuestionara el suceso de los hechos y por medio de los primeros dos avances.
Tomemos el ejemplo del armamento nuevamente. Con la pólvora se introdujo un método fácil y rápido de cómo matar a una persona a distancia, y esto ha evolucionado hasta convertirse en armas de destrucción masiva que en un momento podrían acabar con el mundo. Si seguimos con la teoría de Marx, tarde o temprano habrá una nueva lucha de clases, y ahora no será con palos y piedras, ni con espadas y arcos; será una lucha de clases con armas nucleares de por medio que pueden acabar en segundos con las vidas de más de 100 mil personas. Sin embargo por tan horrible que suene, esto sucederá eventualmente, y será hasta entonces cuando saltemos a una nueva etapa de la historia si es que llegamos a sobrevivir.
Por eso podemos concluir que tanto el lenguaje como el razonamiento pueden considerarse como factores fundamentales para el desarrollo de la Historia, y que como el razonamiento es el motor de la misma. También podemos concluir como el lenguaje lleva al razonamiento y a la inversa; generando un suceso circular cual evoluciona y se adapta a la sociedad pero cuál conserva su fin principal. Además podemos observar cómo la razón ha transformado al mundo en una sociedad con un mejor criterio; un mundo con mayor comunicación y un mundo con mejor Historia comparado al mundo que existía hace apenas unos cuantos siglos.
Total de palabras: 1548
Bibliografía
ÁLVAREZ, Juan. «Marxismo en Red.» Marzo de 2000. Lucha de clases, motor de la Historia. 10 de noviembre de 2010 <http://www.marxismo.org/?q=node/30>.
Idoneos. La filisofía en el Siglo de las Luces. 28 de noviembre de 2010 <http://filosofia.idoneos.com/index.php/Filosofía_e_Ilustración>.
MARGOT, Jean Paul. Moernidad, Crisis de la modernidad y Postmodernidad. Bogotá: Ediciones Uninorte, 1999.
Platón. «La Editorial Virtual.» 2006. La República. 28 de noviembre de 2010 <http://www.laeditorialvirtual.com.ar/Pages/Platon/LaRepublica_00.html>.
Platón. «La Editorial Virtual.» 2006. La República. 28 de noviembre de 2010 <http://www.laeditorialvirtual.com.ar/Pages/Platon/LaRepublica_00.html>.
MARGOT, Jean Paul. Moernidad, Crisis de la modernidad y Postmodernidad. Bogotá: Ediciones Uninorte, 1999.
ÁLVAREZ, Juan. «Marxismo en Red.» Marzo de 2000. Lucha de clases, motor de la Historia. 10 de noviembre de 2010 <http://www.marxismo.org/?q=node/30>.
Idoneos. La filisofía en el Siglo de las Luces. 28 de noviembre de 2010 <http://filosofia.idoneos.com/index.php/Filosofía_e_Ilustración>.