Después de que salí del aeropuerto nos fuimos en el coche de mi tía hasta su casa. Las casas me recordaban a Londres pero mucho más grandes. Cuando llegamos a la casa mi madre y yo estábamos muy cansados del viaje así que nos fuimos a la cama en unos quince minutos después de reunirnos con mi tío y mi primo hermano bebé.
A la mañana siguiente, mientras que comía el desayuno mi tía decidió enfrenarnos todo. Después del desayuno, todos estuvieron de acuerdo en ver una de las siete maravillas del mundo Niagra Falls. Una vez que llegamos a Ontario, Toronto, de inmediato fuimos a un barco para el viaje y nos pusimos nuestros impermeables para protegernos de la cascada y eso ayudó porque hacia muy frío. Yo no quería llevar el impermeable porque era amarillo y Odio ese color pero frente a mí tenia la cosa más hermosa que había visto nunca.
Era tan grande y parecía tan limpio y puro, es muy fuerte también, que sonaba como un tren subterráneo próximo como si se dirigiera más y más cerca. Después del viaje en barco fuimos a una tienda de regalos para comprar algunos souvenirs. Al final mi madre decidió comprar la pintura canadiense y luego fuimos a un restaurante. Todos tenramos hambre así que decidimos ir al restaurante más cercano que podíamos encontrar. Nos encontramos con este viejo comedor, muy bonito desde el exterior y el interior, pero una vez que probé la comida era sorprendentemente buena.
Nuestra estancia en Canadá fue breve pero llena de diversión y recuerdos. Fue mi primera vez en Canadá y mi primera vez viendo el Niagra Falls y algo que no voy a olvidar en toda mi vida.
El año que viene creo que, mi hermano, mi madre y yo podríamos ir a la India para visitar a mis abuelos. Si gano la lotería y para escoger un lugar para ir de vacaciones, sin duda me encantaría ir a Las Vegas Nevada, porque me gustan todas las luces brillantes, casinos, bares y sería un gran lugar para gastar mi dinero, me encantaría ir alli.