D.V.: Pero si lo miramos desde un punto religioso, el mundo natural no puede en si ser desequilibrado o cruel. Lo propiamente natural no fue nunca creado por el hombre, es ajeno a el y por ende no pueden reflejarse los vicios del hombre en la naturaleza. Además fue Dios el que dispuso en la naturaleza los detalles que permiten un perfecto equilibrio y buen funcionamiento de los elementos que lo constituyen. El ser humano al ser creado con la necesidad de búsqueda de la perfección que no logra comprender su rol en la naturaleza, y en el intento de comprenderlo la terminan corrompiendo. Es como decir que un reloj no se armo solo, si no que fue en este caso un relojero que dispuso de los componentes para armarlo y que lo construyó para una función determinada. Si una de estas piezas no funciona correctamente sucede que el sistema completo del reloj se desequilibra.
E.B.: Aunque se diga que fue creada por un ser omnipotente, o Dios no existe o El creó un mundo, una naturaleza imperfecta. Todos los días es la naturaleza la que permite que los animales débiles sean devorados por los depredadores, todos los días es la naturaleza la que nos congela hasta la muerte, la que nos hace pasar hambre, la que destruye nuestras construcciones con catástrofes denominadas ‘naturales’ las cuales pertenecen a la naturaleza. Si estas forman parte de la naturaleza entonces ¿cómo es que Rousseau la puede calificar de “generosa”?. Cito al filósofo John Stuar Mill “Ni siquiera en la más distorsionada y contractada teoría del bien, que nunca fue enmarcada por fanatismo religioso o filosófico, puede el gobierno de la naturaleza ser creado a la apariencia del trabajo de un ser bueno y omnipotente”. En esta frase se demuestra claramente que no tiene sentido que la naturaleza sea producto del Dios al que le se adjunta esta “creación divina”, que en el fondo es tan imperfecta como lo somos nosotros, los humanos.
D.V.: La comprensión del término naturaleza abarca más que la mínima parte de nuestro ecosistema. Cuando se habla de naturaleza, se habla de todo lo natural, la totalidad del universo. Por lo tanto, esta naturaleza es algo auto sustentable, parte de un sistema programado, ordenado. Un todo ordenado nunca ha significado caos por lo que no hay fallas en esta naturaleza, es por esto que es perfecta.
E.B.: No es relevante lo que abarque en total el concepto de naturaleza del cual tratamos. Mientras una parte de este no funcione en armonía, cómo podríamos referirnos a catástrofes naturales o, por ejemplificar otra situación, a esas zonas inhóspitas como el desierto o los glaciares. Si existen detalles de esta naturaleza que son descontrolados, agresivos o desequilibrados, la naturaleza en su totalidad no puede ser perfecta, en el sentido con que los hombres entendemos la perfección moral. Además, la crueldad de la naturaleza al crear criaturas tan desiguales en términos de tamaño, fuerza y defensas muestra que no existe un equilibrio entre las especies que esta naturaleza nos brinda.
D.V.: La naturaleza no crea las especies tan diferentes por ser desequilibrada. La naturaleza está inmersa en un ciclo donde todo funciona respecto a un ecosistema de alimentación de los seres vivos donde se sigue el flujo de una cadena alimenticia, equilibrada. El hombre al ser un ser racional esta constantemente buscando una perfección individual, diferente a la que presenta la naturaleza, lo que se traduce en la búsqueda de vivir mejor, más cómodo, con mayores facilidades y por el mayor tiempo posible. Esto logra corromper ese esquema que la naturaleza ha instaurado, debido al egoísmo del humano y su arrogancia. Es el ser humano el que se siente un ser superior a los demás por lo que toma el control sobre los otros entres de la naturaleza y los manipula a su propio beneficio. Thomas Hobbes es uno de los varios filósofos que se refieren al egoísmo que poseen los seres humanos abiertamente, dice: “la libertad que cada hombre tiene de usar su propio poder como quiera para la conservación de su propia naturaleza… Y, por consiguiente, para hacer todo aquello que mi propio juicio y razón considere como los medios más aptos para lograr ese fin”. En esta cita, Hobbes admite que la naturaleza del ser humano es individualista, muestra que el hombre solo cuida de si mismo y hace todo lo posible por su salvación; por lo tanto rompe este ciclo impuesto por la naturaleza, desestabilizándolo y corrompiéndolo.
E.B.: Puede que el ser humano haya buscado solamente su propia ventaja en nuestros orígenes; sin embargo, en esos tiempos éramos tan insignificantes para este planeta y su naturaleza que no podríamos haberlos corrompido en el más mínimo detalle. Cuando nos volvimos lo suficientemente influyentes, debido a nuestros avances, nos dimos cuenta que para velar por un bien mayor debíamos sacrificar esa voluntad propia de poder, ese deseo de egoísmo para obtener de la comunidad un bien mayor. De esta manera se formó nuestra sociedad, y esta, que vela por el interés de todos, es la prueba de que el ser humano dejó su tendencia al egoísmo una vez que se encontró capaz de influir en el orden de la naturaleza.
D.V.: ¿Que el hombre al haber obtenido mayor poder no interfirió con la naturaleza y su orden? Existen varías catástrofes a nivel del planeta donde vivimos que han sido causadas por el ser humano. Por ejemplo, tenemos el calentamiento global, el cual fue producto en su mayoría debido a que nuestros medios de transporte (creados por nosotros) emiten cantidades tóxicas de dióxido de carbono que terminaron por afectar nuestro ecosistema. ¿cómo puede ser que el hombre no afecte el orden que instauró esta naturaleza si este cambio a logrado la extinción de otras especies?. Variado ejemplos de la historia nos demuestran que la naturaleza, que en algún momento se encontraba en absoluta perfección, ha sido efectivamente corrompida por el ser humano al satisfacer su ley natural, la cual indica una “prohibición a destruir su propia vida o a no hacer nada por conservarla” (me encuentro citando nuevamente a Thomas Hobbes).
E.B.: Pero ese problema, el cuál no estaba planeado por uno, ha sido un problema que la sociedad trata de resolver, revertir. Esto significa entonces que el hombre no se encuentra destruyendo la naturaleza debido a su egoísmo, por lo que este enunciado tiene otra falla.
D.V.: Es absolutamente inadmisible decir que la sociedad es la que se encuentra “arreglando” los problemas que los humanos han causado a la naturaleza y su equilibrio. El hombre corrompió la naturaleza a través de la sociedad. Rousseau habla de un hombre libre en la naturaleza, previo a la sociedad, y que al integrarse a esta, el hombre se volvió un ser corrupto. Dice “La naturaleza obra precisamente con ellos como la ley Esparta con los hijos de los ciudadanos: hace fuertes y robustos aquellos que están bien constituidos y suprime a los demás, diferente de esto, de nuestras sociedades, en donde el Estado, haciendo los hijos onerosos a sus padres los mata indistintamente antes de haber nacido”. Aquí es donde critica a la sociedad mostrando como altera el orden natural, al que he llamado como orden natural impuesto por la naturaleza.
E.B.: El problema con el planteamiento de Rousseau es que está basado en un idealismo, pues no hay manera de saber que sucedía con el hombre en naturaleza. No existen evidencias de que éste se encontrara en armonía con el orden que según usted impone la naturaleza. Quizás los humanos nunca hemos estado en ese orden, quizás los humanos nos encontramos predispuestos a un orden paralelo al que se formó para el resto de las otras cosas existentes, y es por esto que no se puede encontrar una paz en la vida que se lleva. Por paz me refiero a una tranquilidad inmersa en la naturaleza, sin tener que competir por el alimento o simplemente aceptar el hecho de que tendríamos que ser alimento para algunas otras especies. Quizás fue esta capacidad de razonar que hemos desarrollado la que nos distancio del orden natural. Pero en todos los aspectos la naturaleza no puede ser armoniosa y equilibrada, porque existimos en un ambiente de realidad en la que la perfección no existe.
Dialogo Filosófico
Diego Villalobos y Elisa Bascuñán
11ºB y 11ºD
18/06/12
Profesor: Rodrigo Abarca