Una vez los emigrantes se han asentado y establecido en otro país , se ven implicados en un proceso de integración, adoptando diferentes actitudes ante este sentimiento de desarraigo como consecuencia de la inmigración que han experimentado, así como las diferentes formas en las que cada individuo afronta su “nueva vida”
Voy a relatar determinados hechos y ejemplos en los que se puede ver como los emigrantes tienen formas muy diversas de afrontar su nueva situación y de compensar ese sentimiento de desarraigo, disminuyéndolo a veces e incluso eliminándolo.
Españoles que emigran a América en el S. XIX y principios del S.XX
Estos españoles van a América, pues el continente Americano, se convirtió en un territorio que ofrecía mejores condiciones para los emigrantes procedentes de Europa. Van a América también, porque en este continente hay muchos países y sobre todo les une una lengua común , así como ciertas costumbres y raices.
Francisco Prieto, profesor en México de la Universidad Autónoma, nos narra como en el Siglo XIX y a comienzos del Siglo XX se gestaron grandes movimientos migratorios de españoles hacia Sudamérica.
Se produjo un fenómeno singular, en concreto el de los españoles que emigraban a México, eran en general españoles pobres, cuyas causas de emigración eran varias, entre las que podemos citar, el florecimiento no equitativo de la economía en su país de origen, empobrecimiento de sus tierras agrícolas, etc. Así, se puede decir, por ejemplo que en el caso de los vascos, muchos de ellos fueron expulsados debido al sistema de herencia familiar que tenían, el denominado “mayorazgo” en el que como se sabe, el hijo mayor es el que heredaba todo lo de la familia y los demás hijos tenían que buscar “vidas nuevas” es decir, nuevos horizontes, para que la tierra siguiera siendo productiva. También llegaban los asturianos, gallegos, huyendo de la hambruna y de las presiones políticas, eran muy pobres y con un índice alto de analfabetismo, iban llegando todos ellos con el anhelo de encontrar el progreso material, así como una tranquilidad espiritual.
Los españoles que llegaban, eran en definitiva, gente pobre que iban an busca de fortuna, para hacer dinero. Este tipo de emigrantes llegan a México con una actitud de superioridad con respecto al mexicano, lo que crea un ambiente de hostilidad, es decir, se produce un choque cultural. Empiezan a olvidarse de que fueron pobres, de que crearon fortunas gracias al país de acogida, de que fueron gente procedente del campo, en definitiva, de que fueron aldeanos.
Ahora bien, ¿Cómo intentan estos emigrantes españoles disminuir e incluso eliminar algunos, ese sentimiento de desarraigo? Pues bien, en general este emigrante español en general lo que hace es formar comunidades cerradas, pues lo que hacen es vivir entre ellos, se cierran entre ellos al exterior. Tratan de seguir conservando las costumbres de su país de origen, así como las tradiciones en general, por lo que continúan cocinando platos españoles, y reuniéndose para cantar canciones , y bailar bailes de España.
En definitiva, la actitud de este tipo de emigrante es de superioridad hacia el mexicano y las medidas que adoptan para minimizar ese sentimiento de arraigo hacia su pais es el de cerrarse en sí mismos, en el sentido de formar comunidades cerradas. Por ejemplo a este tipo de emigrante no le gusta que sus hijos se mezclen con los mestizos mexicanos, de que se casen con ellos, lo que crea en la población de entonces, cierta molestia.
Españoles que emigran a América en el S. XX tras la Guerra Civil
Por otro lado, Francisco Prieto, también nos cuenta que tras el acontecimiento acaecido en España de la Guerra Civil Española de 1936 - 1939 , se dió origen a otro tipo de refugiado en Suramérica “el exiliado”.
En este caso llegan a México unos 25.000 refugiados procedentes de España, entre los años 1936 y 1942. Se estima que la inmigración de “elite” I inmigración “intelectual”, constituía un 25% del total de refugiados.
Por tanto llega a México, otro tipo de español , un hombre con mentalidad abierta, moderna y con cultura. Había republicanos católicos que no compartían las ideas del general Franco. También había liberales, socialistas, así como artistas. Lo que si cabe destacar de este tipo de emigrante, es que eran personas inquietas, que leían, que se preocupaban por las diferentes manifestaciones artísticas. Personas intelectuales que se asombran ante una nueva cultura, que observan y que se dejan impregnar de esta nueva cultura ante la que se encuentran.
La actitud ante el sentimiento de desarraigo que también experimentan estos españoles “intelectuales” digamos, es el de creatividad que desarrollan en el país de acogida. Se dedican a esparcir sus conocimientos en dicho país, en México. Se dedican a realizar investigaciones y a trabajar en su especialidad, lejos de un ambiente bélico. Los exiliados ayudaron a crear “La Casa de España en Mexico” hoy en dia llamado “El Colegio de México”. Así mismo se puede decir que las grandes editoriales que hay hoy en dia en México, se dan gracias a la entrada de españoles en este país, como son la editorial de Joaquín Mortiz o la de Grijalbo entre otras. Lo que si hay que resaltar es que estos intelectuales realizaron una tarea de un valor inappreciable.
El exiliado español enriqueció al continente americano, con la llegada de intelectuales como Maria Zambrano, Luis Cernuda así como en concreto y para continuar hablando de México, Luis Buñuel, Rodolfo Halffter, Roberto Fernández Balbuena, Remedios Varo y otros.
En resumidas cuentas, si comparamos las distintas actitudes de los inmigrantes españoles y las formas en que cada individuo las afronta en el caso que nos narra Francisco Prieto respecto a los primeros emigrantes pobres, vemos que ante ese desarraigo de su país, muestran una actitud de superioridad, frente al mexicano y la forma de expresarse y comportarse es encerrándose en sus comunidades, en sus costumbres, en sus raices, de forma que lo que menos les interesa es mezclarse con la población mexicana.
En cambio en el otro caso que nos cuenta , también Francisco Prieto, el de los exiliados de la Guerra Civil española, vemos que este tipo de emigrante intelectual, aunque también sufre ese sentimiento de desarraigo, su forma de manifestarlo es el de llevar o acercar España a México, con su conocimiento, con su cultura, en definitiva, enriqueciendo a México de valores inapreciables.
EN LA ACTUALIDAD
Hoy en dia, y dada la magnitud del fenómeno migratorio, que afecta a un gran número de personas, emigrar pasa a ser un componente más dentro de la nueva forma de vida de nuestro tiempo.
La cuestión de identidad es un tema esencial en la vivencia de cada persona. Es obvio que existe un sentimiento de pertenencia en cada uno de nosotros, a una determinada sociedad, a una lengua, a una cultura.
Lo que experimenta en general el emigrante es un conflicto de identidad , un sentimiento de desarraigo, de ruptura con su vida anterior, y muchos emigrantes intentan mitigar ese sentimiento de desarragio de diversas formas.
Voy a citar dos relatos de la actualidad, en los que se puede ver como padres de hijos nacidos en el Reino Unido, intentan mitigar ese sentimiento de desarraigo, transmitiendo a sus hijos su cultura de origen, así como tratan de que la siguiente generación se impregne de la cultura que ellos vivieron.
ENTRE DOS CONTINENTES
Nancy Ortiz es una madre colombiana, que ha fundado en Londres una guardería llamada “Mafalda”. En esta guardería, toda la comunicación se hace en español, tanto a los niños como al personal que trabaja para ellos. Nanci Ortiz es la directora de la guardería.
El único idioma que se habla en esta guardería, es el español, así como solo se transmite a los niños la cultura latina, es obvio que de lo que se trata, es de mantener la cultura latina viva. También se intenta cubrir la afectividad, es decir cubrir esa parte humana de afecto que necesitan los niños, para que se sientan casi como en su casa. Otro factor importante es que se da a los niños comida latina, ensalada, sopas, arroz… en definitiva comida fresca y típica de Sudamérica.
En resumidas cuentas se puede decir que al crear esta guardería, Nancy Ortiz lo que hizo fué tomar medidas para disminuir ese sentimiento desarraigo que estaba experimentando, pues, al crear “Mafalda” sintió como creaba un pequeño mundo latino en Londres, donde permanence la cultura viva, donde se transmiten las canciones y bailes de su país, donde se comen los mismos alimentos, donde se trabaja con personas de su misma nación.
Sus hijos, y también los de su hermana, asistieron a “Mafalda” antes de empezar en la escuela, por lo que esta familia sintió que estaban transmitiendo a sus hijos, parte de la cultura latina, osea que estaban transmitiendoles parte del país que les vió nacer……
ENTRE DOS PAISES
En este caso, voy a relatar lo que supuso para mi, desde el punto de vista de emigrante, haber llegado a otro pais con una cultura y lengua totalmente diferente a lo que yo había vivido hasta entonces.
Yo soy una de esos muchos hispanos, en este caso española, que se ha casado con un inglés. Cuando nos casamos, decidimos ir a vivir a Inglaterra, pues como para tantos otros, las perspectivas económicas y laborables, supuestamente iban a ser mejores.
Tengo que reconocer, que el principio de mi estancia en el Reino Unido fué duro, pues tal como he venido tratando en este tema, experimenté también ese “choque cultural”, que experimentan la mayoría de los emigrantes. El choque cultural más fuerte para mi fué la lengua, y eso que venía con conocimientos de ingles, pués lo estudié anteriormente en el colegio y en la universidad, pero como casi todos los que llegamos aquí, te das cuenta, que como realmente se aprende bien la lengua, es experimentando y teniendo vivencias en el pais de destino.
Posteriormente, y cuando me fuí integrando más en la sociedad inglesa, también pude comprobar que el comportamiento de la gente, así como costumbres, tradiciones y formas de pensar, son diferentes a los de mi país.
Todo esto hizo que yo también experimentara ese sentimiento de desarraigo, de nostalgia, hacia mi pais, hacia mi vida anterior, como tantos otros. Pues te encuentras en una sociedad a la que no perteneces.
Hoy en dia, y aunque me siento bien integrada aquí, todavía hay veces en que se me pasa por la cabeza el decir ¿Que estoy haciendo aquí? ¿Por qué no estoy con mi gente?
Una de las medidas que tomé, ante este sentimiento, fué el de relacionarme más con gente hispana, pues para empezar todos hemos pasado por lo mismo y en segundo lugar, nos une nuestra cultura, nuestra lengua, nuestra forma de pensar. Otra de las medidas fué la de viajar a España varias veces año y en esto se puede decir que soy una afortunada, pues la distancia es corta comparada con la de otros. Otra medida que estoy tomando ahora mismo, es la de inculcar a mis hijas la cultura y la lengua, con clases de español.
En definitiva se puede decir, que para mi, y ahora mismo ese sentimiento de desarraigo es menor, gracias a las medidas que he tomado.
Como conclusión a este tema, sentimiento de desarraigo en la inmigración y el exilio y las diferentes medidas que se toman ante este sentimiento, se puede ver que tanto los emigrantes del S. XIX como los del S. XX, como los casos que he contado de más actualidad , hemos experimentado de una u otra forma este sentimiento de desarraigo , las medidas que hemos tomado tal vez sean diferentes, pero no lo es la nostalgia, por nuestro pais.
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