En 1963, viajé a Nueva York para buscar nuevas oportunidades. No me decido entre dos opciones – diseñar ropa a medida para Elizabeth Arden, o trabajar con zapatos y accesorios, y diseñar ropa ready-to-wear para Christian Dior-Nueva York. No sabía que hacer, y después de mucha contemplación, decidí a pedir consejo de mi amiga Diana Vreeland, la redactora jefe de la revista, Vogue. Le dije que quería hacer ready-to-wear, por que el dinero es allí, y Diana me aconsejó a trabajar con Elizabeth Arden. Me dijo que puedría establecer mi reputación más rápido con ella, porque no era diseñadora sino una empresaria. Diana explicó que si trabajara con Dior, siempre sería eclipsado por el nombre de Christian Dior. Y por eso, trabajaba para Elizabeth Arden por dos años antes de 1965, cuando decidí trabajar para Jane Derby Ltd. El cambio fue un poco arriesgado, porque el sueldo era considerablemente bajo, pero me ofreció la oportunidad de adquirir hasta 33 por ciento de la compañía. Con ella, lancé mi propia empresa, un gran paso adelante en mi carrera. Pero en agosto de 1965, Jane Derby se murió, y me encargó toda la compañía. Al principio, usaba el nombre Óscar de la Renta for Jane Derby, pero después de un año, lo cambié simplemente a mi propio nombre, la misma empresa que uso hoy.
Reconocimientos y Esfuerzos Filantrópicos
Desde los años 1973 a 1976, y de 1986 a 1988, servía como Presidente del CDFA, el Council of Fashion Designers of America. En el año 2000, recibí el ‘Premio de Diseñador del Año’ del CFDA, y otra vez mas en el año 2007, empatado con Proenza Schouler. También, en 1990, estuve honrando con el “Premio de Leyenda Viviente” del CDFA. También soy un dos-veces ganador del Premio de los Críticos Americanos de Moda.
Soy el primer dominicano que he diseñado para una casa de costura francesa, ya que entre los años 1993 a 2002, diseñaba la colección alta costura para la casa de Pierre Balmain. Además, la Republica Dominicana me honró con el orden del Mérito de Juan Pablo Duarte y el orden de Cristóbal Colón. En España, he recibido en 2002 el premio popular, Aguja de Oro.
Soy un miembro del consejo del Opera Metropolitan, el Casa de Opera de Nueva York, Carnegie Hall, y WNET. También soy miembro de unos consejos de organizaciones benéficos, como New Yorkers for Children, la Sociedad de America, y ahora, soy el presidente del Instituto Español de la Reina Sofia, una organización fundada para promover la cultura y lengua española.
Familia
En 1967, me casé con Françoise de Langlade, una redactora jefe de la revista Vogue Francés. Françoise ha trabajado en la casa de moda de Elsa Schiaparelli, y era previamente casada al empresario Jean Bruère y al diplomático Nicholas Bagenow. Después de nos casar, Françoise trabajaba como consultora para Elizabeth Arden, y después creó su propia empresa de decorado. Françoise me ayudaba mucho con mi empresa, porque atraía a muchos de mis primeros clientes. Estábamos casando hasta su muerte en 1983, y después pasaba mucho tiempo solo. Pero el 26 de diciembre 1989, me casé con Annette Reed en La Romana, La Republica Dominicana. Annette es filantropía norteamericana, y la exmujer del editor de revistas, Samuel Reed. Tengo hijastros que amo muchísimo de mis dos matrimonios, y un hijo adoptado, Moises de la Renta, quien es diseñador también.
Conclusión
Hoy, tengo setenta y siete años, pero una de las mejores ventajas de ser un diseñador es que no hay una edad de jubilación en particular. No estoy diciendo que es fácil como empleo, pero para mi, diseñar ropa, zapatos, y accesorios no es trabajo – es una gran pasión. Mi vida hasta hoy era un viaje increíble, y algunas veces, ya no puedo creer que estoy realmente aquí. Cuando era niño, siempre preveía que me haría pintor en un pequeño pueblo al lado de Santo Domingo. Nunca soñaba con hacerme diseñador para las Primeras Damas de los Estados Unidos. Pero no me gustaría de ninguna otra manera. No sé que son mis planes para el futuro, pero si estoy seguro de algo, es de eso: diseñar es algo que será una parte de mi para el resto de mi vida, y es algo que haré hasta mi muerte.