La vida est en otra parte

La estructura externa de la obra está compuesta por ciento veintinueve capítulos  divididos entre siete partes. La estructura interna sigue una disposición lineal en los capítulos uno, tres, cuatro, cinco y siete, pero el sexto y séptimo se despejan de la historia del protagonista y se centran en dos personas cercanas a él, Xavier y la pelirroja. La estructura interna también podría ser aditiva sin embargo predomina la lineal. Se dice que la estructura interna tiene una disposición lineal debido a que sigue continuamente una sola línea del tiempo de la vida del protagonista, excepto en los capítulos antes mencionados. Y se ve la estructura interna dado a que lo largo de la historia se agrega elementos de otras vidas. En la novela se ve la utilización de la técnica in media res, para mostrarnos un panorama anterior antes de iniciar la obra.

La novela se encuentra situada en Checoslovaquia, en la primavera del 68. Durante este tiempo también se vivía la situación de la invasión de la antes Unión Soviética y del golpe de Estado en contra del socialismo a favor del comunismo. Kundera basa su novela sobre estos hechos históricos reales, para hacer que su obra tenga un tono realista con tonos surrealistas y fantásticos.

Como antes mencioné el autor adopta una postura objetiva y realista a lo largo del contexto histórico, y fantástica e irónica dentro del desarrollo del personaje de Jaromil.

El narrador está en tercera persona omnisciente y colectiva, ya que él sabe como se siente el protagonista, lo que oye, percibe, etcétera y lo que sucede alrededor, y nos hace participes de la historia sumergiéndonos dentro del contexto de la misma. Utiliza la voz narrativa y la voz lírica, debido a que se realiza una descripción de la historia de manera indirecta y por los diálogos entre personajes, para sumergirnos más en el contexto en que se lleva a cabo la historia.

Un ejemplo de la situación histórica y las voces del narrador se encuentra en el momento del diálogo del tío, que consideraba a Voltaire descubridor del voltio, y Jaromil. En éste se observa el uso de ambas voces para sumergirnos dentro del contexto histórico y del pensamiento interno de Jaromil.

En las descripciones del texto abundan comparaciones o metáforas, lo cual hace que se tenga una prosa con carácter poético, y esto respalda el tema y la tesis del arte, la poesía.

En el texto se observa el predominio del estilo nominal, para poder describir y abarcar más su relato. Esto debido a que no es literatura de acción, sino de pensamiento.

Los sustantivos son comunes y concretos. Una peculiaridad a destacar en Kundera es el hecho de la omisión del nombre propio de las personas alrededor de Jaromil, por ejemplo, la madre, la pelirroja, etcétera. Esto nos indica la importancia sobresaliente del protagonista en la obra.

La obra en sí no contiene muchos adjetivos, pero los que se encuentran son calificativos y determinantes. Esta para describir más las situaciones, y dar un sentido de pertenencia.

La novela cuenta con pocos pronombres, ya que las personas se mencionan con un sustantivo común o simplemente se omiten.

Los verbos dentro de la novela se presentan en presente y pasado dentro de la historia, pero cuando Kundera nos sumerge, utiliza colectivo en futuro.

Predominan las oraciones largas y compuestas sobre las simples y cortas. La mayoría de las oraciones son yuxtapuestas, conjuntivas y adversativas.

Todo lo anterior se ve representado en la breve explicación de la vida de Arthur Rimbaud.

A lo largo de la novela podemos ver la figura del eufemismo, propia de la literatura kunderiana.  Es utilizada para eliminar el aspecto sexoso de la novela sustituyéndolo con un aspecto irónico y sarcástico, propio de la literatura surrealista. Este aspecto se ve en el momento de la mención del calcetín amoroso y la del payaso entre sus piernas. 

Otra figura utilizada por Kundera es el polisíndeton. Se observa en la repetición de la conjunción “cuando” en la novela, para dar un sentido propio del hecho de que Jaromil cuando se rebele será libre. Esta figura se nota en la descripción de la vida de Gérard de Nerval.

El texto contiene un lenguaje coloquial de la cultura checa, y vulgar, pero éste se ve suprimido mediante el uso del eufemismo. El coloquial nos sumerge en el contexto histórico de Checoslovaquia para darle el tono realista de la obra, y el vulgar nos causa un sentido irónico, remarcando los elementos surrealistas.

La repetición de la palabra “espejo”, es un símbolo del tema principal de la novela. El espejo refleja la vida, la verdad. El reflejo no es más que la poesía en sí misma, ya que ésta es un espejo, un espejo que refleja la vida verdadera, la real. Esto respalda el tema del autor de la vida está en otra parte, ya que en la novela, la vida real está en la poesía. Este aspecto se ve en la casa o sala de los espejos mencionado con frecuencia por Kundera.

A lo anterior se aúnan otras palabras con un significado similar, y que también se utilizan para respaldar el tema de Kundera. Las lágrimas están compuestas de agua, y el agua se representa con un tono azul. Esto simboliza la tristeza de la vida irreal, la que vivimos, y que solo mirándonos en el agua, en el reflejo verdadero, podremos vivir como debemos. Esta imagen literaria se ve en el último momento de la vida de Jaromil. 

La novela es una alegoría de la revolución de la primavera del 68. Jaromil representa a la sociedad comunista, oprimida por el socialismo, que se ve representado por la familia del poeta. El arte, la poesía, simboliza la forma de rebelarse en contra de su familia, de la sociedad, del socialismo.

Simplemente esta novela es una obra de arte de Milan Kundera. Me gusta la forma en que el autor desarrolla a Jaromil, incluso hasta llegar al punto en el que me siento identificado con la vida del protagonista. Muestra un panorama, en el cual, la vida no es la vida hasta que te liberas de las ataduras de tu infancia, y te dispones a vivir por ti mismo.  Es una novela que refleja, en su contenido, una realidad que se adapta a tus sentidos, y te hace experimentar la vida real e imposible. “La vida está en otra parte” es una excelente novela de Kundera, ya que a través de la biografía de Jaromil muestra una vida real y diferente a la que nosotros vivimos, la cual solo podemos vivir realmente desatándonos de las ataduras del pasado y plasmando la vida en los sueños, en el arte, en otra parte: en la poesía.

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