Las nombradas no son infecciones nuevas. Son enfermedades bien investigadas y definidas. Mientras no se descubra un agente único causativo, el SIDA será una enfermedad complicada debido a la multiplicidad de infecciones que lo caracteriza.
Al principio el SIDA apareció entre los homosexuales y fue llamada la plaga gay. Luego, los próximos grupos afectados fueron los drogadictos y hemofílicos que recibieron transfusiones de sangre. Más aterradora fue la aparición de SIDA en bebés con madres infectadas. Ya no es una plaga gay, sino claramente una enfermedad llevada por la sangre (difundida por la sangre y los fluidos corporales).
En el año 1985 había en los Estados Unidos más de ochocientos casos de SIDA con fuentes de transmisión desconocidas.
SÍNTOMAS PRECOCES DEL SIDA.
En personas normalmente saludables, es usual que la primera etapa del SIDA comience con ligeros síntomas similares al resfrío común o la gripe, aunque la enfermedad no es clara. Es muy común que se experimente pérdida de apetito, fatiga, fiebre y dolor de cabeza.
Se los refiere como pródromos, o síntomas de pre-SIDA, que aunque no constituyen signos absolutos, son posibles indicadores. Si avanza la enfermedad, la próxima etapa incluirá problemas de piel, tos, sudor nocturno, diarrea, inflamación de nódulos linfáticos y otros síntomas. Si uno o dos de estos síntomas acompañan los de arriba mencionados pródromos sin poder asignárseles algunas causas específicas, entonces es posible que la persona esté infectada con el virus del SIDA. Una prueba de anticuerpos indicará un resultado positivo, aunque la persona no tenga todos los síntomas de SIDA total. Estos casos son llamados Complejos Relacionados al SIDA (ARC).
El síntoma más común en la etapa más precoz del SIDA es la fatiga, se produce cuando al realizar una tarea física pesada, en consecuencia los músculos precisan más oxígeno y glucosa, la temperatura corporal tiende a elevarse y, para regularla, la piel libera transpiración. El cuerpo pierde agua, sal y otros minerales. Los músculos producen más ácido láctico que se acumula y causa fatiga. La situación es diferente si esta fatiga se acompaña de otros síntomas. Por ejemplo: si el color de la orina es nuboso en momentos de fatiga crónica, es muy posible que existan problemas renales y que el cuerpo está liberando excesos de proteína. Si el color de la orina es extremadamente oscuro podrá ser debido a una hepatitis.
Otro síntoma común de esta enfermedad es la pérdida de peso que puede ser mayor que el 10% del peso corporal (unos 7 Kgs).
Luego viene la fiebre que activa todo el cuerpo: el corazón late con mayor fuerza, aumenta la tasa respiratoria; el hígado intensifica su actividad, destruyendo más proteínas y grasa; los riñones excretan más ácido para lavar la sangre. Las glándulas endocrinas producen más hormonas para mantener normales las funciones del cuerpo. La fiebre es el mecanismo natural de defensa del cuerpo, ya que inhibe la proliferación y actividad de los microbios, y a menudo los destruye; por lo tanto es mejor dejar que la temperatura siga su curso. La fiebre bajará sola.
El próximo síntoma es la tos, que es una expulsión violenta de aire siguiendo una profunda aspiración junto con el cierre de la glotis. Los bronquios necesitan un poco de mucosidad para proteger sus superficies internas.
Una de las manifestaciones de ARC parece ser la coriorretinitis, una inflamación de la retina y coroides en la parte más profunda del ojo. La inflamación podrá pasar, pero se deteriora la visión y aparecen ante los ojos objetos flotantes parecidos a mosquitos u otros pequeños insectos voladores. El paciente podrá tratar de frotarse los ojos, pero el problema se encuentra dentro del humor vítreo del ojo y no sobre la superficie. Finalmente la proliferación de puntos y filamentos hace que se conecten entre sí y se vuelve borroso todo el campo visual y la persona no ve.
En una etapa precoz de la enfermedad, es común que la diarrea sea causada por excesos dietéticos, indigestión, comidas y bebidas heladas, etc. También causan diarrea los alimentos de mala calidad. En todos estos casos funciona adecuadamente el mecanismo de defensa corporal, rechazando y eliminando rápidamente estos alimentos.
Un 90% de los pacientes de SIDA han tenido el sarcoma de Kaposi o la Pneumocystis carinii y algunos ambas cosas.
El sarcoma de Kaposi asociado con el SIDA se ha encontrado casi exclusivamente entre jóvenes de una edad promedio de 35 años. El aspecto de esta enfermedad es que a menudo aparecen repentinamente varias o numerosas manchas o protuberancias de diversos colores. Estos tumores proliferan en poco tiempo y crecen rápidamente para formar placas de gran tamaño. Aunque muchos casos se originan en las piernas o pies, otros se inician en varias partes del cuerpo tales como la boca, órganos genitales, manos, nariz, etc. El sarcoma también puede crecer en el aparato gastro-intestinal o en varios órganos.
El tumor de sarcoma de Kaposi del SIDA no es un crecimiento metastasiante, pero es multicéntrico, significando que el tumor puede surgir en cualquier lugar de la piel o dentro del cuerpo, independientemente del tumor original. En consecuencia, algunos investigadores afirman que el sarcoma de Kaposi relacionado con el SIDA no es cáncer.
Cada factor, alimento animal (carne) y alimento vegetal (azúcar) tiene un efecto específico sobre nuestro cuerpo y salud, por tal motivo los enfermos norteamericanos de SIDA y los de África y el Caribe tienen cuadros ligeramente diferentes. Alrededor de un 35% de los casos de SIDA en Estados Unidos incluye el sarcoma de Kaposi, que tiene una fuerte relación con el excesivo consumo de carne y alimento animal, mientras que solo un 15% de los casos africanos incluye el Kaposi.
El sarcoma de Kaposi es probablemente una de las infecciones más fáciles de curar entre las relacionadas con el SIDA. Es esencial dejar de comer carne y todo otro alimento animal.
Más del 60% de los pacientes de SIDA tienen Pneumocystis Carinii. Es una forma rara y nueva de pulmonía.
La pulmonía no es una enfermedad, sino sólo un síndrome. Muchos diferentes microbios causan esta molestia y entre las otras causas están los gases tóxicos, como el cloro.
Mayormente este parásito (pneumocystis carinii) ataca los pulmones y a veces el cerebro y el sistema nervioso. Por un excesivo consumo de azúcar y miel la gente ha debilitado su cerebro y sistema inmunológico, exponiendo así sus pulmones y cerebro a la infección. El brazil es el mayor productor de miel y segundo productor de azúcar mundial y la PCP fue descubierta en Brazil.
En casos de PCP debe evitarse estrictamente toda azúcar y la miel.
Más del 70% de los SIDA africanos está relacionado con la pulmonía y tuberculosis, enfermedades estrechamente vinculadas al azúcar y la miel.
SIDA TOTAL.
Poco después de identificar el HIV-I como virus del SIDA, los investigadores, por medio de autopsias pudieron detectar la presencia del mismo virus en el cerebro y sistema nervioso de personas muertas por SIDA. De manera que pronto se determinó que el virus del SIDA afecta mucho más que el sistema inmunológico; y que ataca directamente al cerebro y el sistema nervioso antes de destruir el sistema inmunológico.
CONCLUSIÓN
Estados Unidos es el país más rico del mundo, con el mayor desarrollo científico, tecnológico, educativo y sanitario; en África es lo opuesto, la gente es primitiva, pobre y de escasa educación, caminando con los pies desnudos en el peor medio ambiente sanitario. Pero desgraciadamente África y Estados Unidos comparten las tasas más elevadas de infección por el virus de SIDA. La similitud entre ambos países debe ser el medio ambiente interno o sea la sangre y los fluidos linfáticos que rodean las células corporales. Este medio ambiente, es constituido por lo que comemos.
Hay que establecer un equilibrio entre la cantidad de alimentos de origen vegetal que ingerimos, como así también los alimentos de origen animal.